La contundente derrota del Real Madrid ante el Paris Saint Germain en las semifinales del Mundial de Clubes ha desencadenado una oleada de severos cuestionamientos en el ámbito deportivo español. El conjunto blanco sucumbió por un abultado marcador de cuatro goles a cero en el estadio MetLife de Nueva Jersey el pasado miércoles, en una actuación que fue calificada de desastrosa por numerosos observadores.
El resultado fue interpretado por muchos como un crudo despertar o un duro golpe de realidad para el equipo. En los análisis posteriores al encuentro, se hizo particular hincapié en una serie de fallos defensivos que facilitaron la goleada del Paris Saint Germain, llegando a sugerirse que el equipo mostró una desconexión notable en su esquema.
Por otro lado, la impecable ejecución del conjunto parisino fue ampliamente elogiada por su contundencia y dominio sobre el terreno de juego. Se destacó la forma arrolladora en que el PSG superó al equipo madrileño, asegurando su pase a la final. Algunos análisis más profundos incluso sugirieron que el encuentro expuso vulnerabilidades en el Real Madrid que recordaron etapas anteriores de incertidumbre y fragilidad.
Esta eliminación marca un comienzo desafiante para Xabi Alonso, el recién nombrado director técnico del Real Madrid. El joven entrenador deberá emprender una ardua labor para restaurar la confianza del vestuario y la afición, tras un revés que ha sacudido profundamente al madridismo.
El Paris Saint Germain, por su parte, se clasificó a la final del certamen y se enfrentará al Chelsea el próximo domingo
