Operativos conjuntos con la Policía Boliviana detectan infracciones en zonas clave de la ciudad.
La Intendencia Municipal de La Paz, en colaboración con la Policía Boliviana, llevó a cabo operativos de control en Sopocachi y la avenida Perú, clausurando locales por venta ilegal de alcohol.
La Intendencia Municipal de La Paz, en colaboración con la Policía Boliviana, llevó a cabo operativos de control durante la noche del viernes en las zonas de Sopocachi y la avenida Perú, con el objetivo de intervenir establecimientos que estuvieran operando de manera irregular. Se detectó que la venta no autorizada de bebidas alcohólicas era la infracción más común entre los locales inspeccionados.

En el macrodistrito Periférica, específicamente en la avenida Perú, se clausuraron dos discotecas. Una de ellas solamente tenía autorización para la venta de alimentos, mientras que la otra carecía por completo de licencia para operar. Ambos lugares fueron desalojados, precintados y se decomisaron bebidas alcohólicas que no contaban con registro sanitario. Asimismo, se realizó la intervención de dos licorerías, una de las cuales fue cerrada por no poseer la licencia de funcionamiento correspondiente, según informes de la agencia oficial de noticias municipales.

En Sopocachi, dentro del área del programa “Sopocachi Zona Segura”, se clausuraron dos restaurantes y un café por vender bebidas alcohólicas a pesar de tener autorización únicamente para la venta de alimentos. Uno de los establecimientos, ubicado en las cercanías de la plaza Abaroa, fue descubierto operando en contra de las regulaciones establecidas. Según reportes de la Dirección de Seguridad Ciudadana, estos locales ya habían sido advertidos previamente y, en una intervención anterior, el personal municipal había sido agredido.

Estas acciones se encuentran en concordancia con la Ley 259 de Control al Expendio y Consumo de Bebidas Alcohólicas, así como con normativas municipales que regulan la categoría y operación de actividades económicas. Las sanciones impuestas fueron respaldadas por resoluciones administrativas emitidas por la Subalcaldía Cotahuma, que reiteró la prohibición de apertura de nuevos negocios de expendio de bebidas alcohólicas en Sopocachi desde la implementación del programa en el año 2009.
Las acciones de control realizadas por las autoridades municipales y policiales buscan garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes en cuanto a la venta de bebidas alcohólicas en La Paz.

La Guardia Municipal de Tarija actuó ante denuncia de venta de alcohol en una institución educativa.
La intervención de la Guardia Municipal en una unidad educativa de Tarija reveló la presencia de personas en estado de ebriedad y riñas, lo que alertó sobre la gravedad del consumo de alcohol en un espacio educativo.
La Guardia Municipal de Tarija llevó a cabo una intervención en una unidad educativa luego de recibir una denuncia de vecinos que alertaba sobre la presunta venta y consumo de bebidas alcohólicas en el lugar. Henry Rivera, encargado de la Guardia Municipal, explicó que tras recibir la denuncia, el personal operativo se trasladó de inmediato al sitio para verificar la situación.

Al llegar al establecimiento, se encontraron con aproximadamente 30 personas dentro de la unidad educativa, algunas de las cuales se encontraban en estado de ebriedad e incluso algunas estaban dormidas en el interior del lugar. Según Rivera, se registraron incluso riñas y peleas entre los presentes.

Los responsables del evento aseguraron tener una autorización para llevar a cabo la actividad, pero no pudieron presentar ningún documento que respaldara esta afirmación. Ante esta falta de documentación, se procedió a realizar la notificación correspondiente y se elaborarán los informes necesarios para tomar las medidas pertinentes.

La presencia de consumo de alcohol en una institución educativa es un hecho grave que pone en riesgo la integridad de los estudiantes y va en contra de las normativas establecidas. La Guardia Municipal, en conjunto con las autoridades pertinentes, se encargará de investigar a fondo este incidente para asegurar que se tomen las acciones necesarias para evitar que situaciones similares ocurran en el futuro.

Es fundamental que se identifiquen y sancionen a los responsables de permitir este tipo de actividades dentro de un espacio educativo, ya que atentan contra la seguridad y el bienestar de la comunidad escolar. Por tanto, se espera que las autoridades competentes actúen con prontitud y contundencia para garantizar un ambiente seguro y adecuado dentro de las instituciones educativas de la región.
Es necesario tomar medidas urgentes para evitar que situaciones como estas se repitan en instituciones educativas, garantizando la seguridad y bienestar de los estudiantes.