Tras la reciente investidura de Rodrigo Paz como el nuevo presidente del Estado, el expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé compartió sus reflexiones sobre el panorama nacional, señalando la existencia de un palpable espíritu de optimismo en el país. En este contexto, subrayó la persistente urgencia de abordar una profunda reforma del sistema judicial.
El exmandatario enfatizó la necesidad ineludible de implementar un programa integral, inclusivo y con amplia participación para la transformación de la justicia. Este esfuerzo, a su juicio, debería comenzar con un exhaustivo diagnóstico que permita identificar los desafíos fundamentales y establecer metas ambiciosas. Destacó que esta tarea no puede reducirse a una mera sesión de debate, sino que requiere un proceso sostenido de construcción de consensos, involucrando activamente a los distintos poderes públicos, la comunidad académica y la ciudadanía en general.
Una evaluación crítica del sistema de justicia es indispensable, según su perspectiva. Propuso que el diagnóstico no se limite a las altas magistraturas, sino que se extienda, de manera primordial, al ámbito del servicio público. Argumentó que la justicia, al ser un servicio esencial, debe ser examinada desde sus cimientos hacia arriba, y no a la inversa, para asegurar una comprensión completa de sus deficiencias y fortalezas.
Rodríguez Veltzé también analizó los intentos fallidos de reforma judicial en administraciones anteriores. Atribuyó el estancamiento de estas iniciativas a una gestión centralizada, a menudo orquestada desde el Ministerio de Justicia. Expresó su expectativa de que los esfuerzos actuales tomen un rumbo distinto, caracterizado por una mayor pluralidad y una aproximación más descentralizada.
En este marco de discusión sobre la renovación judicial, se ha programado el primer diálogo interinstitucional para la reforma judicial para el próximo 14 de noviembre en la ciudad de Sucre, un evento que se perfila como un paso inicial hacia la concreción de estas anheladas transformaciones


