Perú y Bolivia han formalizado recientemente un acuerdo de gestión comercial diseñado para optimizar el flujo de comercio exterior boliviano a través del puerto peruano de Ilo. Este pacto estratégico busca otorgar significativas facilidades comerciales y aplicar descuentos tarifarios a las operaciones de carga, consolidando la posición de Ilo como un terminal marítimo crucial en la costa sur del Pacífico.
La rúbrica de este convenio se llevó a cabo en la sede de la Cancillería peruana en Lima, con la participación de Juan Carlos Montenegro, gerente general de la Empresa Nacional de Puertos (Enapu) de Perú, y Daniel Villarroel, gerente ejecutivo de la Administración de Servicios Portuarios de Bolivia (ASP-B), quienes representaron a sus respectivas naciones en este importante acto.
Durante la ceremonia, el viceministro de Relaciones Exteriores de Perú, Félix Denegri, destacó que este entendimiento es fundamental para integrar el comercio exterior de Bolivia en la plataforma del centro logístico y portuario que Perú está desarrollando activamente en Sudamérica. Explicó que esta integración se materializará mediante el comercio de cabotaje marítimo, conectando el puerto de Ilo, ubicado en la región sureña de Moquegua, con los puertos centrales de Callao y Chancay. Esta red facilitará considerablemente el acceso de Bolivia a los mercados de Asia-Pacífico.
En este contexto, el megapuerto de Chancay, que inició operaciones hace aproximadamente un año y fue construido con inversión del conglomerado naviero estatal chino Cosco, se presenta como un elemento transformador. Se proyecta que esta infraestructura reducirá drásticamente los tiempos de tránsito marítimo para productos, como alimentos y bienes agrícolas, con destino a China, pasando de más de 30 días a un estimado de 22 días.
El vicecanciller peruano subrayó además que el acuerdo fortalecerá las relaciones económico-comerciales entre ambas naciones vecinas y contribuirá directamente a los esfuerzos del gobierno peruano por impulsar el desarrollo socioeconómico del sur del país, particularmente en lo que respecta a los servicios portuarios. Afirmó que la política exterior de Perú ha promovido consistentemente el movimiento de carga de comercio exterior boliviano a través de sus puertos del sur, una tendencia que se mantendrá en el futuro.
Eva Chuquimia, encargada de negocios de Bolivia en Perú, estuvo presente en la ceremonia como testigo de honor, acompañando al vicecanciller peruano.
Este acontecimiento se enmarca en un período de revitalización diplomática entre Lima y La Paz. Tras la reciente victoria electoral de Rodrigo Paz Pereira en Bolivia, quien asumirá la presidencia el 8 de noviembre, se alcanzó un consenso con el presidente interino de Perú, José Jerí, para restablecer la presencia de embajadores en ambas capitales. Las legaciones diplomáticas habían permanecido sin titulares desde principios de 2023, a raíz de una crisis diplomática que surgió cuando el gobierno boliviano, entonces liderado por el presidente Luis Arce, criticó la detención y el posterior encarcelamiento del entonces presidente peruano Pedro Castillo, tras su fallido intento de disolver el Congreso y la no aceptación de la sucesión presidencial de su entonces vicepresidenta, Dina Boluarte
