La selección argentina de fútbol selló una contundente victoria por 3-0 ante Venezuela en el penúltimo encuentro de las eliminatorias suramericanas para el Mundial 2026. El astro Lionel Messi fue la figura excluyente con dos anotaciones, complementadas por un tanto de Lautaro Martínez, en un partido disputado en territorio argentino. Este resultado complica significativamente las aspiraciones de la Vinotinto, que ahora solo puede aspirar a un lugar en la repesca mundialista.

Con este triunfo, el conjunto albiceleste, que ya había asegurado su clasificación a la Copa del Mundo hace meses, acumuló 38 puntos en 17 partidos. Esto le permite mantenerse en la cima de la clasificación de manera incontestable, con una ventaja considerable a falta de una única jornada.

Por su parte, Venezuela conservó la séptima posición con 18 puntos. Su permanencia en esta plaza se vio favorecida por el triunfo de Colombia, que superó 3-0 a Bolivia, asegurando así su propia clasificación. Sin embargo, Bolivia aún alberga esperanzas de arrebatarle a la Vinotinto su puesto en la repesca en la última fecha.

Desde el pitido inicial, Argentina ejerció un dominio absoluto del balón frente a un rival que adoptó una postura defensiva y replegada. La portería de Rafael Romo fue asediada tempranamente, destacando una combinación entre Lionel Messi y el joven Franco Mastantuono en el tercer minuto de juego, que culminó en un peligroso remate de Julián Álvarez. Mastantuono, de apenas 18 años y reciente fichaje del Real Madrid, alternó con incisividad las bandas junto a Thiago Almada, mientras Messi se movía libremente por todo el frente de ataque y Julián Álvarez actuaba como referente ofensivo. A pesar de una serie de disparos, muchos de ellos de media distancia, la resistencia de Romo se mantuvo firme durante gran parte de la primera mitad.

El marcador se abrió en el minuto 39. Tras una recuperación de balón en el mediocampo por parte de Leandro Paredes, este lanzó un preciso pase para Álvarez, quien, ante la salida del guardameta Romo, asistió a Messi para que definiera a placer ante una portería desguarnecida. El capitán argentino experimentó una jornada particularmente emotiva, siendo ovacionado en innumerables ocasiones por la afición y mostrando una visible emoción incluso antes del inicio del encuentro. En el otro extremo del campo, Emiliano ‘Dibu’ Martínez, otro de los ídolos locales, apenas fue puesto a prueba, con una débil intervención ante un cabezazo de Salomón Rondón y algunas acciones para despejar pases imprecisos de sus propios defensores.

La segunda mitad mostró a un equipo venezolano con una propuesta más ofensiva, aunque sin lograr materializar oportunidades claras de gol, lo que a su vez generó mayores espacios en su defensa, a pesar de los ingresos de Yeferson Soteldo y Josef Martínez. La primera ocasión clara del complemento para Argentina llegó en el minuto 60, cuando Messi, tras un rebote en el área, se encontró mano a mano con el portero, quien logró contener el remate a corta distancia con su cuerpo. Poco después, el capitán argentino asistió a Nicolás González, quien había ingresado en lugar de Mastantuono, pero tampoco pudo superar a Romo. Seguidamente, Almada desperdició una inmejorable oportunidad dentro del área chica.

El segundo tanto llegó en el minuto 75, gracias a la astucia de Messi, quien ejecutó rápidamente un tiro libre, tomando desprevenida a la zaga rival. Esto permitió a Nicolás González centrar cómodamente un balón que fue cabeceado a la red por Lautaro Martínez, ante una débil reacción del arquero venezolano. Cuatro minutos más tarde, Rodrigo de Paul entregó un pase de precisión quirúrgica a Thiago Almada, quien, con generosidad, habilitó a Messi para que el astro convirtiera el 3-0 definitivo. Con esta anotación, Messi alcanzó los ocho goles en estas eliminatorias, consolidándose como el máximo artillero del certamen.

Tras este resultado, Argentina se preparará para visitar a Ecuador el próximo martes 9 de septiembre, en la última jornada de las eliminatorias. Ese mismo día, Venezuela se enfrentará como visitante a Colombia en un partido crucial para sus aspiraciones mundialistas

El esperado encuentro futbolístico entre la selección colombiana y su similar boliviana, correspondiente a la decimoséptima jornada de las Eliminatorias para la Copa Mundial de 2026, que se celebrará en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez, se desarrollará bajo la atenta mirada de las condiciones meteorológicas.

En los días recientes, diversas regiones del territorio nacional han sido escenario de precipitaciones intensas, las cuales han desencadenado situaciones de emergencia y anegamientos en múltiples zonas. Esta coyuntura ha generado cierta inquietud entre los aficionados que planean asistir al compromiso. Las previsiones meteorológicas indican una probabilidad del 60% de lluvias durante el transcurso del día del partido.

No obstante, los pronósticos se tornan más optimistas a medida que se acerca la hora de inicio del cotejo, fijado para las 19:30. Para ese momento específico, el riesgo de aguaceros disminuye considerablemente, situándose en un 15%, lo que sugiere la posibilidad de que el desarrollo del juego se efectúe bajo un ambiente más propicio.

En lo que respecta a las temperaturas, Barranquilla anticipa una jornada de calor significativo. Se espera que el mercurio oscile entre los 27 °C durante las primeras horas de la mañana y alcance los 33 °C hacia el mediodía. Adicionalmente, la sensación térmica podría elevarse hasta los 38 °C. Por consiguiente, más allá de la eventualidad de la lluvia, el calor y la elevada humedad ambiental se perfilan como factores adicionales que los equipos deberán gestionar

La recta final de las eliminatorias sudamericanas de fútbol presenta un encuentro de alto voltaje donde dos selecciones se miden con realidades opuestas. Una de ellas se encuentra a un paso de sellar su boleto para la próxima Copa del Mundo, un torneo que por primera vez se disputará en tres naciones anfitrionas. La otra, en cambio, depende de una concatenación de resultados casi milagrosa para aspirar siquiera a la repesca. El pitazo inicial está programado para las 19:30.

Para la selección uruguaya, el panorama es diáfano. Una victoria o un empate serán suficientes para asegurar su clasificación, desatando la celebración de sus aficionados y consolidando una racha impresionante de cinco Mundiales consecutivos, tras sus participaciones en Sudáfrica 2010, Brasil 2014, Rusia 2018 y Catar 2022.

La situación de Perú es, por el contrario, extremadamente delicada. El equipo dirigido por Óscar Ibáñez necesita imperativamente ganar sus dos partidos restantes, al mismo tiempo que Venezuela pierda sus dos compromisos y Bolivia no sume más de un punto. Incluso si estos escenarios se materializan, la diferencia de goles entre las tres naciones involucradas se convertiría en un factor determinante.

Con este telón de fondo, uruguayos y peruanos saltarán al campo a las 19:30, hora boliviana, en el legendario Estadio Centenario de Montevideo. Este icónico recinto fue inaugurado el 18 de julio de 1930 con un partido que, curiosamente, enfrentó a estas mismas selecciones, culminando con una victoria charrúa por 1-0 gracias a un gol de Héctor Castro.

El partido de este jueves marcará el décimo enfrentamiento entre la Celeste y la Blanquirroja en este estadio por eliminatorias mundialistas. El historial en el Centenario favorece ampliamente a los locales, con siete victorias, un empate y dos triunfos para la escuadra peruana. La última vez que Perú se impuso en este escenario fue en 2004, con anotaciones de Nolberto Solano, Claudio Pizarro y Jefferson Farfán.

A diferencia de los cuatro encuentros anteriores, este duelo no contará con la presencia de los máximos goleadores históricos de ambas selecciones: Luis Suárez y Paolo Guerrero. El delantero uruguayo anunció su retiro de la selección el año pasado, mientras que el atacante peruano se perderá el compromiso debido a una lesión.

El estratega argentino Marcelo Bielsa deberá realizar ajustes en la alineación uruguaya. Las suspensiones de Nahitan Nández y Ronald Araujo abren la puerta a Guillermo Varela y Sebastián Cáceres en el once inicial. El mediocampo estará bajo la batuta de Federico Valverde y Rodrigo Bentancur. En la delantera, la sanción de Darwin Núñez sugiere que Rodrigo Aguirre será el referente de ataque. Así, la probable formación de Uruguay incluiría a Sergio Rochet en portería; Guillermo Varela, Sebastián Cáceres, Mathías Olivera y Matías Viña en defensa; Federico Valverde, Rodrigo Bentancur y Giorgian de Arrascaeta en el centro del campo; y Facundo Pellistri, Rodrigo Aguirre y Brian Rodríguez en la ofensiva.

Por el lado peruano, Kenji Cabrera se perfila como una alternativa para ocupar la posición que habitualmente desempeña Guerrero. Además, se prevé el retorno a la titularidad de Yoshimar Yotún, quien regresa a la selección tras recuperarse de una complicada lesión de ligamentos en la rodilla que lo mantuvo alejado de la competición por más de un año. El esquema que Óscar Ibáñez podría disponer estaría conformado por Pedro Gallese en el arco; Luis Advíncula, Carlos Zambrano, Renzo Garcés y Marcos López en la zaga; Andy Polo, Erick Noriega, Christofer Gonzales y Yoshimar Yotún en el mediocampo; y Kenji Cabrera junto a Luis Ramos en el ataque. El arbitraje estará a cargo del argentino Facundo Tello.

La tensión es palpable en la antesala de este decisivo choque. Uruguay busca asegurar su pasaje a la próxima cita mundialista, mientras que Perú, aferrado a una remota posibilidad, se esforzará por prolongar su sueño clasificatorio