TT Ads

La Policía de Cochabamba indaga un perturbador caso de aborto forzado que ha generado conmoción en la ciudad.
Un joven de 26 años obligó a una mujer de 28 años a ingerir tabletas abortivas, resultando en la pérdida del embarazo de la víctima y la detención preventiva del agresor.
La Policía está llevando a cabo una exhaustiva investigación sobre un perturbador caso de aborto forzado que ha conmocionado a la ciudad de Cochabamba. En este caso, Dayler, un joven de 26 años que mantenía una relación sentimental con una mujer de 28 años, la obligó a ingerir tabletas abortivas, lo que resultó en la pérdida del embarazo de la víctima. Este acto atroz ha llevado a que un juez dicte una orden de detención preventiva por tres meses para Dayler, quien ahora se encuentra recluido en el penal de San Antonio.

De acuerdo con el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) de Cochabamba, Freddy Vargas, tanto la víctima como el agresor son estudiantes de Medicina, lo que añade una capa adicional de complejidad y preocupación a este caso. El hecho tuvo lugar en la madrugada del 16 de mayo en un inmueble ubicado en la avenida Oquendo, donde Dayler sometió a la joven, que se encontraba en las primeras semanas de embarazo, a la ingesta de tabletas abortivas, algunas de ellas administradas por vía oral y otras de forma vaginal.

Tras el nefasto incidente, la mujer intentó expulsar las tabletas en el baño, pero al sentir malestar tuvo que ser trasladada de urgencia a una clínica y posteriormente al Hospital Materno Infantil Germán Urquidi, donde quedó internada. La gravedad de la situación llevó al personal de la FELCV a actuar rápidamente, y gracias a un plan de búsqueda activado el 21 de mayo, Dayler fue arrestado alrededor de las 19:00 del mismo día.

En la audiencia de medidas cautelares celebrada recientemente, el juez dictaminó la reclusión preventiva del agresor, lo que evidencia la seriedad de los cargos que enfrenta. Lo que llama poderosamente la atención es que Dayler ya tenía varios procesos judiciales en su contra, según lo informado por Vargas, incluyendo acusaciones por rapto y trata de personas, violación de menores de edad, pornografía, espectáculos obscenos con niños y niñas, lesiones graves y leves, así como violencia familiar y doméstica. Este sombrío historial del agresor pone de manifiesto la necesidad de una respuesta contundente por parte de las autoridades para garantizar la seguridad y protección de la sociedad.
La gravedad de este caso de aborto forzado pone de manifiesto la necesidad de una respuesta firme por parte de las autoridades para garantizar la seguridad y protección de la sociedad.

TT Ads

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *