La provisión de combustibles en el país se encuentra asegurada por las autoridades, quienes han reafirmado el compromiso de mantener el suministro de diésel y gasolina hasta el término de la actual gestión gubernamental. A pesar de la persistencia de algunas filas en los puntos de venta, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) reporta una progresiva normalización de la situación.

Un representante de la ANH en Tarija detalló que, en una jornada reciente, se distribuyeron 200.000 litros de gasolina y 190.000 litros de diésel para abastecer a más de una decena de estaciones de servicio en la región, incluyendo las localidades de Bermejo y el Gran Chaco. La logística de aprovisionamiento se inicia temprano, con entregas a los surtidores a partir de las 5:00 de la mañana en Tarija y desde las 6:00 de la mañana en Bermejo y el Gran Chaco, garantizando así la disponibilidad del carburante desde las primeras horas del día.

Existe una estrecha coordinación con Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para la programación de las entregas a las diversas estaciones de servicio. Las autoridades han observado una disminución en las aglomeraciones de vehículos para la adquisición de combustibles, lo que sugiere una mejora en la distribución.

Se ha reconocido una reducción en el suministro de aproximadamente el 60% ocurrida semanas atrás, pero se ha enfatizado que la situación se está regularizando con la llegada de los volúmenes necesarios. La planificación de YPFB asegura que no habrá desabastecimiento.

Para los próximos días, se espera la llegada de más de 400.000 litros de combustible a través de los ductos, con la capacidad de bombear desde Villa Montes hacia Tarija para reforzar la garantía del suministro. Adicionalmente, se están recibiendo carburantes importados que ingresan por diferentes puntos fronterizos de Tarija, incluyendo Bermejo, Paraguay, Villa Montes y Salvador Maza (Yacuiba), transportados por cisternas.

Asimismo, la estabilidad del abastecimiento se ve fortalecida por la aprobación de créditos en la Asamblea Plurinacional, destinados a asegurar la disponibilidad de divisas. La llegada de buques con carburantes a Arica, Chile, también contribuye a la cadena de suministro. La distribución de combustibles se realiza tanto por ductos como por cisternas, aprovechando la infraestructura existente, como el poliducto que conecta Tarija y Villa Montes, apto para el transporte de diésel, gasolina y otros líquidos