
La falta de insumos médicos en hospitales de Tarija ha generado una crisis en el sistema de salud de la región.
La escasez de medicamentos en los hospitales de Tarija ha alcanzado niveles críticos, poniendo en riesgo la atención médica de la población y generando preocupación en las autoridades de salud.
En las últimas semanas, los hospitales de diversas localidades de Tarija han enfrentado graves dificultades para adquirir medicamentos, lo que ha exacerbado la crisis en el sistema de salud pública de la región. A pesar de las afirmaciones del Gobierno respecto a la puntualidad en la transferencia de recursos, los centros de salud atribuyen esta escasez a factores externos como la escasez de oferentes y la inestabilidad del dólar, que ha provocado un aumento en los precios y el desabastecimiento de las farmacias hospitalarias.
La directora del Sistema Único de Salud (SUS), María Bolivia Rothe, en una entrevista con El País, desmintió que la falta de medicamentos sea resultado de la inacción del Gobierno central. Rothe destacó que se trata de una responsabilidad compartida y que los fondos para la adquisición de insumos fueron transferidos desde enero de este año a la Gobernación de Tarija. Se detalló que se asignaron 16,7 millones de bolivianos para distintos hospitales, siendo el Hospital Regional San Juan de Dios (HRSJD), el Materno Infantil, el Hospital Virgen de Chaguaya de Bermejo y el Intraid los beneficiarios.
A pesar de la disponibilidad de estos recursos desde principios de año, la ejecución de los mismos ha sido desigual entre los hospitales. Según los datos proporcionados por Rothe, el Hospital Virgen de Chaguaya ha ejecutado el 88,79% del presupuesto asignado, mientras que el HRSJD ha alcanzado el 72%. En contraste, el Materno Infantil e Intraid presentan tasas de ejecución significativamente más bajas, con un 19,60% y 11,29%, respectivamente.
La directora del SUS enfatizó que las compras podrían haberse realizado antes de que la situación se agravara, instando a los hospitales a hacer uso de las “compras menores” para agilizar la adquisición de medicamentos.
A pesar de las acciones tomadas por el Gobierno, como la eliminación de aranceles para la importación de medicamentos y la actualización de precios a través de la Agencia Estatal de Medicamentos (Agemed), muchas licitaciones continúan sin oferentes. Rothe reconoció las dificultades para atraer proponentes a las licitaciones y señaló que esta situación escapa al control del Ministerio de Salud.
En el caso específico del municipio de Bermejo, se aprobó un presupuesto de 1.226.000 bolivianos para la compra de medicamentos, pero solo se adjudicaron 723.000 debido a que cerca de 90 ítems quedaron desiertos, representando un valor aproximado de medio millón de bolivianos. El presidente del Concejo Municipal, Gabriel Calapiña, explicó que el incremento en los precios de los medicamentos ha disuadido a las empresas de participar en las licitaciones.
Ante esta situación crítica, se ha solicitado al Gobierno nacional un refuerzo económico para hacer frente a la emergencia sanitaria. Con más de 2 millones de bolivianos de saldo en caja y bancos de la gestión anterior, se busca utilizar estos fondos para cubrir las necesidades urgentes en el sistema de salud de la región.
La falta de medicamentos en los hospitales de Tarija es un problema complejo que requiere de acciones urgentes por parte de las autoridades para garantizar la salud de la población.