
El uso del peso argentino se vuelve cada vez más común en transacciones diarias debido a la crisis económica en Bolivia.
La devaluación del boliviano ha generado un aumento en el uso del peso argentino en Bermejo y Yacuiba, afectando los precios y el poder adquisitivo de los ciudadanos. Esta tendencia refleja la crisis económica que atraviesa Bolivia desde principios de 2023.
La devaluación del boliviano está teniendo repercusiones significativas en las regiones fronterizas de Bermejo y Yacuiba, donde el uso del peso argentino se ha vuelto cada vez más común en las transacciones diarias. Esta tendencia refleja la crisis económica que ha golpeado a Bolivia desde principios de 2023, con escasez de dólares, inflación persistente y un aumento en los costos de importación que han afectado tanto a la producción nacional como al poder adquisitivo de los ciudadanos.
En Bermejo, la situación es especialmente notable, ya que tanto comerciantes como transportistas están optando por cobrar en pesos argentinos en lugar de bolivianos. Nathalie Gálvez, vicepresidenta del Comité Cívico de la ciudad, ha denunciado que esta práctica ha llevado a un aumento en los precios, con taxis que ahora cobran hasta 500 pesos argentinos en lugar de los 5 bolivianos que deberían ser la tarifa básica. La devaluación del boliviano también se ve exacerbada por el contrabando a la inversa hacia Argentina, lo que ha afectado directamente el costo de vida de los habitantes de Bermejo.
Por otro lado, en Yacuiba, si bien el dólar no es tan común como en Bermejo, el peso argentino ha ganado terreno como moneda de uso corriente. La feria semanal ha experimentado un aumento en su tamaño, atrayendo a compradores argentinos en busca de productos más baratos que en su propio país. El presidente de la Federación de Juntas Vecinales de Yacuiba, Pedro Hidalgo, ha expresado la incertidumbre que se vive debido a la devaluación del boliviano, que ha reducido drásticamente el poder adquisitivo de la población.
Fernando Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija, ha destacado que la devaluación de la economía boliviana se refleja en la pérdida de protagonismo del boliviano en las regiones fronterizas, donde monedas extranjeras como el peso argentino se han vuelto más aceptadas. En el último año, el boliviano se ha devaluado en más del 70% en términos inflacionarios, lo que ha llevado a un aumento significativo en el poder adquisitivo del peso argentino en comparación con el boliviano.
En resumen, la devaluación del boliviano está transformando la dinámica económica en las regiones fronterizas de Bolivia, donde el uso de monedas extranjeras se ha vuelto cada vez más común y la población se enfrenta a una situación de incertidumbre respecto a su futuro económico.
La devaluación del boliviano está transformando la dinámica económica en las regiones fronterizas, donde monedas extranjeras como el peso argentino se han vuelto más aceptadas, generando incertidumbre en la población respecto a su futuro económico.